Crianza en barricas de roble americano de fabricación propia con una edad media de 4,5 años, donde permanecieron 4 años, trasegándose por el método tradicional cada 6 meses hasta su embotellado, en febrero de 2020.
Vista:
De capa media alta y con un elegante borde granate en el final de copa.
Olfato:
Gran amplitud de aromas, destacando las notas de fresa silvestre, cereza roja, ciruela, zarzamora y arándano rojo que combinan con los aromas de tabaco, brioche, café molido, caramelo, cedro y flor de canela.
Paladar:
En boca sobresale por el elegante equilibrio entre el alcohol y la acidez, la frescura y sus taninos pulidos y amables que otorgan un refinado paso por boca. Su retrogusto, fino, delicado y muy largo, que el tiempo en botella continuará redondeando, haciendo de este nuevo Gran Reserva 904 un vino con una gran capacidad de guarda.
Maridaje:
Carnes y pescados no demasiado especiados y postres con chocolate. Ideal como copa de sobremesa.
Crianza en barricas de roble americano de fabricación propia con una edad media de 4,5 años, donde permanecieron 4 años, trasegándose por el método tradicional cada 6 meses hasta su embotellado, en febrero de 2020.
Vista:
De capa media alta y con un elegante borde granate en el final de copa.
Olfato:
Gran amplitud de aromas, destacando las notas de fresa silvestre, cereza roja, ciruela, zarzamora y arándano rojo que combinan con los aromas de tabaco, brioche, café molido, caramelo, cedro y flor de canela.
Paladar:
En boca sobresale por el elegante equilibrio entre el alcohol y la acidez, la frescura y sus taninos pulidos y amables que otorgan un refinado paso por boca. Su retrogusto, fino, delicado y muy largo, que el tiempo en botella continuará redondeando, haciendo de este nuevo Gran Reserva 904 un vino con una gran capacidad de guarda.
Maridaje:
Carnes y pescados no demasiado especiados y postres con chocolate. Ideal como copa de sobremesa.